sábado, 22 de febrero de 2014

Formación: CASAS ROMANAS

El pasado jueves 20 de febrero, la arqueóloga del Consorcio Ana María Bejarano Osorio impartio una charla en el Aula de Patrimonio sobre las casas romanos a los voluntarios eméritos, posteriormente complementada con visita guiada a la Casa del Mitreo.


El tipo de vivienda romana dependía de la sitauación económica de la familia que la ocupaba. En ciudades superpobladas como Roma existían casas vecinales de varias alturas (insula) para las familias más humildes. Las viviendas romanas que pueden contemplarse en Mérida responden a un modelo de casa señorial (domus), en las que residían familias de alto nivel económico.

 Casa del Mitreo

Estas casas estuvieron en uso durante varios siglos, siendo realizadas las más importantes durante el siglo IV, tras ser designada Mérida capital de la Diócesis de Hispania y sede, por tanto, del vicario de la misma. Este nombramiento supuso un revulsivo en materia constructiva y sirvió de desencadenante de un periodo de florecimiento para la ciudad.

 Casa de los Mármoles - Morería

Las necesidades de las familias provocaron, en numerosas ocasiones, ampliaciones de la vivienda original con resultado de diferentes distribuciones en cada caso. Las casas situadas en el interior de la muralla se extendieron ocupando los antiguos pórticos de las calles o construyendo una segunda altura, mientras que las situadas fuera de la muralla dispusieron de mayor espacio para ser de gran amplitud.

 Casa del Anfiteatro

Las diferentes dependencias de la casa estaban destinadas a un uso privado y familiar o a satisfacer las relaciones sociales de la familia. Así, los dormitorios, cocinas, baños e, incluso, pequeños comedores formaban parte del ámbito más personal, mientras que estancias como el triclinium, o comedor para invitados, el tablinum, que hacía las funciones de despacho o biblioteca, y el oecus que se utiliza como salón de reuniones, fueran o no familiares, eran el reflejo de la vida social en el ámbito doméstico.


 Distribución de una casa romana (wikipedia)

Las casas disponían en fachada, al lado de la puerta principal, de dependencias que eran utilizadas como tiendas (tabernae) que el propietario alquilaba, en muchas ocasiones a esclavos y libertos.

Las domus solían estar espléndidamente decoradas en suelos y paredes. Pinturas y mosaicos dotaban de contenido a unas habitaciones que, en general, eran austeras en mobiliario. La esquisitez de estos pavimentos, la riqueza con la que estaban realizados y los motivos representados eran la carta de presentación de los moradores de la casa, el reflejo de su nivel económico e intelectual.

Casa Basílica

Con variables en cada una de ellas, en general, se puede hablar de un modelo de casa importado de Roma en el que las posibilidades del propietario determinaban el mayor o menor número de patios o espacios abiertos en torno a los cuales se articulaban las diferentes habitaciones. Así, desde el atrio o primer patio de las casas, junto a la puerta de entrada, hasta el peristilo - más amplio y rodeado de columnas - y, en algunos casos, el viridarium o jardín porticado, se conservan en Mérida diferentes tipos de viviendas. Cada uno de estos patios se construia con una apertura superior, en el tejado, compluvium, para recibir luz, aire y agua procedente de la lluvia que se recogía en su correspondiente estanque o impluvium desde el que, a su vez, era encauzado hasta una cisterna.

En Mérida se pueden visitar las casas romanas del Área Arqueológica de Morería, la casa del Teatro (Casa Basílica), la Casa del Mitreo, la Casa de la Torre del Agua y la Casa del Anfiteatro (estas dos en el recinto también denominada de la Casa del Anfiteatro, actualmente cerrado por obras de construcción de la cubierta). También se conservan restos de viviendas de época romana en la cripta del MNAR y en la cripta de Santa Eulalia.

DOCUMENTACIÓN:


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